Beneficios de hacer un curso intensivo de inglés en verano

Los cursos intensivos de inglés que se imparten durante el verano son una de las opciones más demandadas para aprender inglés. Estos cursos siempre han funcionado muy bien para los alumnos, y han sido de gran ayuda en su avance en el conocimiento de la lengua anglosajona. En este artículo vamos a detallarte algunos de los beneficios que obtendrías al tomar uno de estos cursos.

Aprender inglés se ha convertido, para muchos, en la asignatura pendiente. Un idioma no se aprende en dos días y en la actualidad cualquier actividad que implique tiempo de dedicación se hace difícil de desarrollar. Tenemos vidas ajetreadas llenas de responsabilidades laborales y familiares, y estas nos dejan poco tiempo para acudir a alguna academia de inglés donde poner al día nuestro conocimiento del idioma británico. Pero eso puede cambiar, y más ahora con la llegada del verano. Muchas academias ofrecen una gran variedad de cursos intensivos durante los meses estivales con los que podrás dar a tu inglés el nivel que merece sin tener que estar meses o años de estudio. En tan solo un curso de verano podrás obtener grandes objetivos. Seguro que si buceas en este artículo podrás encontrar suficientes motivos para matricularte en un intensivo de verano.

 Velocidad de aprendizaje

Los cursos intensivos de inglés provocan en el alumno un aprendizaje más dinámico y rápido. En estos cursos se comprimen un mayor número de horas de clase en poco tiempo, por lo que el alumno avanzará y aprenderá más rápido que en los cursos donde solo se imparten un par de horas semanales.

 Más tiempo libre y relajación

Cuando te decides a aprender una nueva lengua el desafío mental que se te presenta no es sencillo, pero no es el único problema que surge. Muchas veces es más difícil cuadrar las horas de clase con tu vida personal y laboral, que el propio aprendizaje. Por eso es una buena opción elegir un curso intensivo en verano. Suelen ser meses con menos carga de trabajo y más tiempo libre para dedicar al estudio y las clases.

Reciclarse

Acudir a un curso intensivo durante el verano para aprender inglés está muy bien, pero estos cursos también son una idea estupenda para reciclarnos y retomar esas estructuras y conocimientos que ya tenemos un poco oxidados en algún rincón de nuestra memoria. La corta duración del curso junto a la gran cantidad de horas, hacen de este contexto un encuadre perfecto para repasar y refrescar todo el inglés que hayas aprendido hasta ahora. Así podrás prepararte para afrontar un nuevo nivel al siguiente curso, o simplemente volver a poner a tu inglés exactamente en el mismo punto donde lo dejaste. No olvides que los idiomas, si no los practicas, se olvidan.

Motivación

Si algo te asegura un curso intensivo, siempre que acudas y te impliques en todas tus clases, es una rápida evolución. Con estos cursos podrás conseguir objetivos a corto plazo, lo que te provocará una gran motivación ante el curso y el idioma, y… ¡no te imaginas lo importante que será tu motivación para lograr tus objetivos tanto a corto como a largo plazo!

 Contenido

Cuando acudes a uno de estos cursos el tiempo y el avance premia por encima de la profundidad del contenido. Este tipo de cursos suelen centrarse en lo importante y obvian aspectos superfluos del idioma. Aprenderás y estudiarás todos los campos y destrezas del inglés pero pasarás por alto detalles irrelevantes o inútiles de la lengua inglesa.

Exámenes Oficiales

Definitivamente, los intensivos de verano son una de las mejores opciones para preparar exámenes oficiales como los exámenes de Cambridge. Son cursos plenamente orientados y preparados para que consigas pasar el examen en tiempo record. Mucha gente dedica todo un curso o varios a preparar uno de estos exámenes, pero prepararlos en un intenso de verano también es una muy buena opción.  Tan solo con unas cuantas semanas de estudio conseguirás aprobar y obtener el título.

 Inmersión Lingüística  

Siempre nos aconsejan ir a vivir a un país de habla inglesa, ya que es la manera más  rápida para aprender inglés. Esto se debe a la inmersión lingüística que se vive al mudarte a uno de estos países, la necesidad de hablar inglés durante muchas horas. Los estudiantes de inglés que acuden a academias o escuelas solo suelen dedicar un par de horas semanales al idioma, por lo que comparado con la inmersión lingüística de vivir en un país anglosajón, no hay color en cuanto a la velocidad de aprendizaje.

Por tanto, hacer un curso de inglés en Irlanda, Inglaterra o Estados Unidos es una buena manera de mejorar tu nivel de inglés.

 Comodidad

Durante el curso las academias de inglés están llenas de alumnos interesados en aprender inglés, pero cuando llega el verano, este interés desaparece de la mayoría de ellos y abandonan las academias hasta el comienzo del nuevo curso. Es cierto que no son pocos los que deciden comenzar en este momento sus estudios del inglés pero si acudes a un curso de verano podrás darte cuenta que las academias están mucho menos masificadas que durante el invierno. Un menor número de alumnos beneficiará tu aprendizaje y tu comodidad a la hora de acudir a clases y participar en ellas. El entorno será mucho más ameno y calmado si compartes clase con un par de alumnos y el profesor que si debes hacerlo con un número mayor de compañeros.